domingo, 20 de septiembre de 2009

Amor Universal Bendiciones en la montaña

Era se una vez un joven, que amaba la vida, haba llegado su hora de iluminarse con todo su alrededor, todo le parece maravilloso, una instancia para engrandecer la conciencia.
Esta persona había pasado por la noche oscura del alma, esa que al escucharla te congela los huesos y te paraliza, pero había encontrado el día renacerdor del espíritu , se propuso
humilde mente recibir y aprender las enseñanzas que la vida le había entregado. Se conecto con el corazón y comprendio que la manera clave de ser felices es amándonos profundamente y atrevernos a mirarnos hacia dentro, este joven del que hablamos, todos los inviernos desde Santiago viajaba cada vez que podía a su casa en la Montaña de Chillan, un lugar mágico en el cual experiencias de luz y sombra se sanaban. Había tenido encuentros maravillosos con hermanos (amigos y amigas) y hermana del corazón. Y durante años este tipo de encuentros con el mismo y con seres queridos le habían comenzado a enviar bellos mensajes (En un momento de su vida este fue el lugar en donde comienzo su locura, y el lugar en donde la sano de raíz).

El sentía que hablaba con su casa, ella le contaba historias, las cuales con el poder de su corazón se volvían realidad. Esto lo comprovo la primera vez que este pensamiento paso por su cabeza. Imagino y luego la realidad se hizo presente, estaba sentado sobre su computador escribiendo una historia y de pronto sonó un ruido fuerte, eran los ladridos de su perro, Rabit quien era el mejor perro guardián que pudieses imaginar, cada vez que un ser se hacia presente el ladrada fuertemente, corría como una flecha a respetar su territorio. Ladridos que demostraban que llegaban hermanos con la intesionalidad de robar la casa, el sabia que iban a llegar por lo que no se exalto cuando los vio abrir las puertas, el seguía escribiendo feliz de la vida su historia, mientras estos dos hombres lo miraban con extrañeza. Cuando cruzaron la Puerta Benjamín dijo( se podría haber llamado de cualquier forma ); Bienvenidos hermanos los invito a mi casa a vivir las enseñanzas que nos van a sanar. Les regalo todo lo que quieran , incluso una experiencia en mi vida. Los estaba esperando por lo que los quise ayudar un poco y les deje esas tres bolsas de alimentos para que no se demoren. Mira hermano, te estaba escribiendo una historia y llegaste a mi vida para aprender. Estoy feliz de verte aquí, vas a permitir que aprenda mas y mas de la vida y vamos a permitir que un mundo mas justó se materialice compartiendo nuestros bienes, para unirnos y equilibrar juntos todo lo que nos separe. Los hermanos se quedaron mirando, no sabían que hacer cuando les contaba que estaba esperándolos escribiendo la historia, lo miraron y lo abrazaron, los amo profundamente, he intento disolverles todas sus dolores, lloraron como nunca antes, ya que se dieron cuenta que el amor es tan grande que a ellos también los bendecian con él si querían, se emocionaron mucho y le pidieron perdón, el les dijo que para perdonarlos era necesario enojarse y el no estaba enojado con ellos, por lo que aunque quisiera no podría perdonarlos , eso sí que podía amarlos y compartirles los alimentos mas todo lo que necesitasen , les agradecía con el alma el momento de amor y sincronía que habían creado en el, ya que confirmaron todas sus dudas de la sanacion y le permitieron amarse profundamente. De esta forma los nuevos amigos se fueron con los regalos en sus manos y y muy agradecidos del momento maravilloso que estaban viviendo.

Comparto esta historia como un acto psicomágico en el cual Benjamín y los hermanos son
parte de mi y de todos quienes unimos nuestras luces y sombras para aprender de la vida y de la sabiduría universal que esta para todos día a días momento a momento.
Amor mi y a todos. Mucha paz en sus corazones.

M *